Colegio de Odontólogos de Santa Fe – 1era Circunscripción

Salud bucal para niños

Datos a tener en cuenta

¿Cómo ayudo a mis hijos a cuidar sus dientes y prevenir las caries?

Enseñar a su hijo los métodos de higiene bucal apropiados es una inversión en salud que le proporcionará beneficios para toda la vida. Lo primero es darle un buen ejemplo; al cuidar usted sus propios dientes el niño recibirá el mensaje de que la salud bucal es algo importante. Todo lo que haga de la higiene dental una tarea divertida, como cepillarse los dientes junto con sus hijos o permitirles elegir sus propios cepillos dentales, fomenta una higiene bucal apropiada.

Para ayudar a sus hijos a proteger sus dientes y encías y reducir el riesgo de formación de caries, enséñeles a seguir estos simples pasos:

¿Qué técnicas de cepillado puedo enseñarles a mis hijos?

Es importante supervisar el cepillado de sus niños hasta que dominen estos simples pasos:

¿Cuándo debe mi hijo comenzar a utilizar hilo dental?

Dado que el hilo dental elimina los restos alimenticios y la placa depositada entre los dientes, que es un lugar donde no llega el cepillo; se recomienda que a partir de los cuatro años, comience a utilizar hilo dental con sus hijos. A los ocho años la mayoría de los niños pueden comenzar a utilizar el hilo dental por sí mismos.

¿Qué son los selladores de fisuras y cómo sé si mis hijos los necesitan?

Los selladores de fisuras crean una barrera altamente eficaz contra las caries, ya que son delgadas capas plásticas que se aplican a las superficies de masticación de los dientes posteriores permanentes del niño, donde se forman la mayoría de las caries. La aplicación de un sellador no es dolorosa y se puede efectuar en una sola visita al dentista. Él le indicará si un sellador es necesario para sus hijos.

¿Qué es el flúor y cómo sé si mis hijos reciben la cantidad apropiada?

El flúor es una de las mejores maneras para ayudar a prevenir el deterioro de los dientes. Se trata de un mineral que, al combinarse con el esmalte dental, lo fortalece. La medida preventiva utilizada en México es el consumo de sal adicionada con la cantidad adecuada de fluoruro, y en zonas donde el agua de consumo contiene cantidades grandes de flúor, debe consumirse sal sin fluoruro. Consulte a su dentista sobre el área donde usted vive. Además es recomendable el uso de una pasta de dientes con flúor en todos los casos. Pregunte a su dentista cuál pasta de dientes debe usar para obtener el nivel adecuado de flúor. En los niños menores de 6 años es recomendable utilizar una pasta de dientes con 500 partes por millón de flúor.

¿Qué importancia tiene la dieta en la salud bucal de mis hijos?

Una dieta balanceada es necesaria para que sus hijos desarrollen dientes fuertes y resistentes a las caries. Además de la gama completa de vitaminas y minerales, la dieta de un niño debe incluir mucho calcio, fósforo y los niveles apropiados de flúor.

Así como el flúor es la mejor protección para sus hijos contra las caries, los alimentos entre comidas de manera frecuente son el peor enemigo. Los azúcares y los almidones presentes en muchos alimentos como galletas, dulces, frutas secas, refrescos, galletas saladas y papas fritas se combinan con la placa en los dientes para crear ácidos. Estos ácidos atacan el esmalte dental y pueden formar caries.

Cada «ataque de placa» puede durar hasta 20 minutos después de finalizada la comida. Incluso un pequeño bocado puede provocar que la placa produzca ácidos. Por eso, lo mejor es evitar la ingestión de alimentos entre comidas.

¿Qué debo hacer si mi hijo se astilla un diente, se lo rompe o lo pierde?

Ante una lesión en la boca de su hijo, consulte inmediatamente al dentista. Él examinará el área afectada y determinará el tratamiento apropiado.

Si su hijo experimenta dolor por un siente roto o astillado, visite inmediatamente al dentista. Si lo desea, puede suministrarle un calmante hasta el momento de la cita. De ser posible, guarde la parte del diente que se ha roto y llévela al dentista.

Si perdió un diente por accidente, llévelo al dentista tan pronto como se posible. Evite tocar el diente y no lo limpie. Guárdelo en agua o leche hasta llegar al consultorio. Es posible que el diente pueda volver a ser colocado en la boca del niño mediante un procedimiento llamado reimplantación.